jueves, 7 de junio de 2007

Renacer

Olga, mi ángel astrológico, me escribe que Urano está cruzando mi ascendente, lo que es como un nuevo nacimiento. Le contesto que es tal como me percibo: siento toda mi vida extinguiéndose, sin pasado ni ataduras ni recuerdos. Sólo me interesa el presente y observo el futuro como algo totalmente nuevo y diferente o, más bien, como el cumplimiento de una promesa que me hice a mi misma antes de nacer.

Tengo ráfagas de una intensa y entusiasta creatividad y proyectos y anhelos y momentos de un cansancio mortal, especialmente mental. Tengo ganas de estar cerca de la Naturaleza y/o de pasear y divertirme.

Olga me dice que este tránsito trae “una influencia externa o colectiva que altera de forma espectacular tu vida”. Busco en Google y encuentro: “En la astrología, Urano simboliza la ruptura con la tradición y el desarrollo de algo nuevo. Es un planeta que va sincrónicamente asociado con ideales de verdad, justicia, libertad, fraternidad e igualdad, así como en cualquier tendencia progresista colectiva que se enfrente con lo establecido. Urano representa también nuestra necesidad de sentirnos libres de toda atadura a la responsabilidad, para progresar más allá de las fronteras físicas y psíquicas hacia una nueva dimensión y realidad. Es intuición, invención y ruptura idealista. El uso apropiado indica preocupación espiritual por la sociedad humana, para que conozca la libertad del cautiverio de la ignorancia”. No podría describir mejor lo que me está pasando y espero que continúe hasta su esplendor.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me encuentro en tu misma dimensión, de un todo infinito y eterno, a la vez que cambiante. Me ahoga la emoción ante la luz que me permite expandirme para desarrollar tantos proyectos maravilosos y romper ataduras, que siento van desatándose, poco a poco.

Un fuerte abrazo

Conchi (Desde España) Esa "í" es para mitigar mi nombre :-)