Desde hace
tiempo, vengo escribiendo acerca de la necesidad de conectarnos con la
Energía Femenina. Cuando vivimos dentro de una estructura determinada,
como es la sociedad, no nos damos cuenta de los condicionamientos a los que
ella nos somete. Nos creemos libres, que podemos decidir
cualquier cosa, cuando eso no es real; es una fantasía desde el mismo momento
en que elegimos dentro de un menú disponible y, teniendo una mente dual,
generalmente lo hacemos por sí o por no: acatamos o nos rebelamos, pero es
difícil que nos tomemos el trabajo de analizar e investigar cuáles son los
fundamentos y las consecuencias de lo que se nos presenta como “normal”.
Vivimos en
una sociedad patriarcal. Entonces, los valores, las formas, las
instituciones, los acuerdos, la moda, lo que sea estará teñido de esa impronta.
¿Por qué pensamos que debemos luchar la vida en lugar de abrazarla?
Porque los méritos de lo Masculino pasan por la conquista y la
apropiación. ¿Por qué hablamos de víctimas y victimarios? Porque
el poder, no el amor, es la cúspide de su orden. ¿Por qué creemos que
tenemos que competir, estar primeros, ganar, actuar rápido, tener voluntad y
tenacidad, hacer continuamente? Porque esas son virtudes de su
energía. ¿Por qué priman la lógica, la razón, lo general y abstracto,
el conocimiento, la objetividad por encima de cualquier otra
consideración? Porque ese es su proceder. Todo lo demás es
considerado débil, inútil, sin provecho, pasivo.
¡Gran
tema! Lo pasivo (cualidad y estigma de lo Femenino) es
considerado flojo, apocado, frágil, humillante, susceptible de ser penetrado,
mancillado, atacado. No existe poder ni importancia en lo Femenino,
es vulnerable y por eso vulnerado. Las mismas mujeres hemos tomado
esa creencia y nos mostramos fuertes, indestructibles, activas, agresivas,
inconmovibles (aunque criamos hijas princesas e hijos machos). ¿Qué
posible beneficio puede haber en ser femenina en un mundo masculino?
Ciertamente ninguno. Y así estamos…
Luego de
años de liberación femenina, parece que el triunfo fue tomar los más bajos “beneficios”
de lo Masculino y encarnarlos: acostarse con cualquiera y jactarse;
seducir de la manera en que a muchos de ellos les gusta (abierta y
provocativamente, mientras se es denigrada en bailes y canciones como en el
reggaeton); adquirir sus vicios (emborracharse y drogarse); hablar ofensiva y
groseramente; trabajar todo el día; aguantar lo que sea; renegar de las
emociones; buscar un lugar alto en la sociedad consumista; ganar de cualquier
forma.
¿Apoyo una
vuelta a la era victoriana? Obviamente que no, me interrogo
cómo anclar una nueva energía femenina en estos tiempos. ¿Niego las
verdaderas superaciones? Para nada, me cuestiono la razón por la
que todavía no pudimos encontrar el poder de lo Femenino y terminamos
avalando lo peor de lo patriarcal.
Comprendo
entonces las violencias de ambos lados. Los hombres sienten la
competencia, no encuentran su lugar, se resisten a perder sus privilegios,
pero también están encontrándose con la vulnerabilidad de lo Femenino dentro
de ellos mismos y no hallan un espacio en donde compartir sus monstruos
internos, sus debilidades, sus dudas, sus temores. ¿Cómo y dónde
trabajar la enorme fuerza de la testosterona y de la sexualidad, la necesidad
de ser fuertes siempre, de ser proveedores, analfabetos emocionales, reyes
del mundo? La imposibilidad e impotencia del conjunto es tomada por
individuos que lo bajan de las formas más atroces.
Las mujeres
están tomando conciencia de siglos de sometimiento y salen (masculinamente) a
luchar; a imponerse abierta o disimuladamente (a veces con manejos turbios);
a pelear por lo que consideran propio, cuando quizás sea algo que “compraron”
de lo patriarcal y no las representan verdaderamente. Ponerse en lugar
de la víctima; abogar desde lo negativo (“no” a algo en lugar de “sí”);
defenderse y atacar desde la debilidad, no ayuda mucho pero es lo que se
puede hoy (el péndulo pasa de un extremo al otro hasta encontrar el
equilibrio).
Estamos en una
encrucijada complicada. Nos estamos reorganizando a pasos acelerados y
tenemos la oportunidad de hacer una transformación que enaltezca lo mejor de
ambas energías. La sociedad debe hacer cambios profundos y radicales si
queremos que este caos sirva para la creación de un mundo mejor. Para
comenzar, podríamos conocer, practicar y honrar las cualidades de lo Femenino:
la afectividad, la belleza, lo pequeño y particular, lo receptivo, la
entrega, la paciencia, la perseverancia, la subjetividad, el estar, la
espera, la suavidad, la intuición, la compasión, la colaboración, el
sentimiento de Dios, etc.
El Cuerpo y
la Tierra están asociados a lo Femenino: connotan materia, renovación,
pasividad comprendida como presencia, atracción, albergue, confianza,
sustento, apoyo, regazo. Cuando las mujeres comprendamos el maravilloso
y potente regalo que somos, los dones cálidos y nutricios que poseemos,
cuando nos paremos firmes y apacibles sobre nuestros pies, sostenidas por la
Madre Tierra, habremos encarnado la Amorosa Energía de la Diosa.
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miércoles, 26 de octubre de 2016
Energía Femenina en una sociedad patriarcal
Publicado por Laura Foletto en 15:54 1 comentarios
miércoles, 19 de octubre de 2016
Consejos saludables
Hay al mínimo tres razones por las que nuestro físico se
quebranta: por uso inapropiado (mala alimentación, posturas erróneas, poco
descanso, “accidentes”), reflejo cuerpo-mente (cada síntoma, enfermedad,
actitud, es producto de problemas psicológicos no resueltos que pasan al nivel
material) y cambios energéticos que atraviesan la humanidad y el planeta
(algunos lo llaman Ascensión).
No tengo una fuerte salud, lo que sumado a los vaivenes de la
Energía, ha dado como resultado que haya pasado por distintos procesos. Me gustaría compartir algunos consejos que
quizás te ayuden:
-
Rinitis, alergias,
sinusitis: nariz tapada, dificultad para respirar, senos cargados son las
consecuencias de estos temas. Muchos
confunden rinitis vasomotora con alergia y se medican con remedios que no
corresponden. La diferencia es que los
niveles de IgE son normales y que los ataques de estornudos se suelen disparar
básicamente ante cambios de temperatura.
Sea como sea, algunas recomendaciones son:
Solución salina: se vende en las farmacias, para lentes de contacto
(no confundir con el líquido para conservarlos, que tiene químicos; es agua con
sal). Viene en envases chicos y grandes
de medio litro. Conviene comprar uno de
cada uno y, cuando se acabe el chico, rellenarlo con el grande. Al levantarte a la mañana y acostarte a la
noche, echa un par de veces en la nariz y suénala fuerte, hasta limpiarla
bien. Si es necesario, puedes repetir algunas
veces durante el día.
Inhalador Medex: es algo tan viejo que pensé que no existía más,
pero todavía se consigue. Úsalo un par
de veces al día, si necesitas abrir las vías.
Tintura de hierbas: durante años, tomé toda clase de pastillas y
usé gotas para la nariz en cantidades industriales, al punto de la adicción
(esos remedios suelen tener ese efecto y además es desesperante no respirar
bien). Cuando me di cuenta de la locura
en la que estaba metida, fui a una otorrinolaringóloga y (Dios pone a las
personas indicadas en el camino si uno está preparado) ella me mandó a una
cierta farmacia que hacía una tintura con distintas hierbas y, con eso más
estas otras sugerencias, dejé todo.
Perdí el rastro de la doctora y la farmacia cerró, así que no puedo
pasar la receta. Lo comento porque
quizás puedas encontrar a alguien que te ayude desde un punto de vista natural.
Maniobras: Para despejar los
senos para-nasales (sobre todo si hay sinusitis), oprime fuertemente la
lengua contra el paladar, mientras aprietas con el pulgar entre las dos
cejas. Repítelo hasta que sientas cómo
se descarga la mucosidad. Para destapar la nariz: echa la cabeza
hacia atrás, aprieta la nariz y aguanta la respiración lo que puedas; esto
dispara un mecanismo de supervivencia y abre la nariz instantáneamente. Para
descongestionar en un resfrío: la noche es lo más difícil, así que: duerme
con almohadas altas y respira unos momentos dentro de las sábanas (no mucho
tiempo porque el anhídrido carbónico es perjudicial para el cerebro, pero un
ratito puede destapar la nariz). Más
información aquí.
Advertencia: como bien lo sé, estos temas son proclives a hacernos caer
en ansiedades, adicciones y compulsiones.
Lo que aconsejo aquí no es para cambiar lo que estés haciendo y usar la
solución salina 20 veces, el inhalador 15 y las maniobras 10: es para
desacelerarte, tener paciencia y aprender a respirar correctamente (la
desintoxicación es dura pero necesaria).
La respiración diafragmática (además de múltiples beneficios) provoca la
descarga de ciertos neurotransmisores que calman, por lo que, si respiras en el
pecho y acelerado, nunca te serenarás y continuarás el círculo vicioso. Saca el foco de pensar todo el día en tu
falta de aire y ponlo en respirar, tranquilizarte y cambiar tus hábitos.
-
Resfríos,
garganta: un pequeño tip que puede hacer la diferencia: cuando sientas que
tu garganta comienza a irritarse, pasa la lengua por el paladar. Si notas pequeños “granitos”, masajéalos
fuerte con la lengua continuamente hasta que desaparezcan. Normalmente, esto es suficiente para detener
un resfrío o un problema de garganta.
-
Gastritis,
acidez, digestión: vientre hinchado, dolores, acedía son los síntomas más
comunes.
Limón:
exprime un limón, mézclalo con agua tibia en un vaso y tómalo en ayunas. Si tienes problemas de hígado, ingiere antes
una cucharada de aceite de oliva extra virgen y enseguida el limón (con una
pajita, porque el ácido del limón puede afectar el esmalte dental; luego
enjuaga bien la boca). Algunos, lo
mezclan también con bicarbonato de sodio.
No estoy de acuerdo con esto, porque el bicarbonato tomado por mucho
tiempo tiene bastantes contra-indicaciones (sobre todo si tienes presión alta,
problemas en los riñones o el corazón, etc.).
En todo caso, intercala el limón y el bicarbonato o toma solamente
limón.
Mastica
bien: sea producto de los tiempos que corren (literalmente) o de la
ansiedad o de lo que sea, casi nadie mastica apropiadamente los alimentos, por
lo que los tragamos casi enteros, provocando muchos inconvenientes. Asegúrate de tomar pequeñas porciones,
destrozar bien el bolo y recién después tragarlo. Esto hace que el estómago no tenga tanto
trabajo y que comas menos (activando el reflejo de llenado). No tomes bebidas carbonatadas ni con pajitas
ni hables mientras comes, porque te llenas de aire.
Agua:
estar horas sin comer o tomar agua empeora la acidez. Aliméntate en pocas cantidades, cada cierto
tiempo (el que sea más conveniente para ti).
Toma dos o tres litros de agua por día (no tiene porqué ser mineral si
tienes agua potable, además de que contaminas con plásticos el planeta); si
puedes conseguir Agua Diamantina, mejor.
Helicobacter
Pylori: esta bacteria es responsable de muchas gastritis (junto con los
antiinflamatorios y otros remedios… más los problemas psicológicos). Hazte la prueba y trátalo si lo
adquiriste.
Maniobras:
inhala, aprieta la boca del estómago mientras exhalas (o aprieta bajando desde
el final de esternón por unos diez centímetros), repite unas cuantas
veces. Hazte masajes circulares por toda
la panza, comenzando por el lado derecho y terminando en el izquierdo (en el
sentido de las agujas del reloj) con lentitud y comprimiendo donde más
hinchazón o dolor sientas, con cuidado.
Advertencia:
comemos como un trámite más, mirando televisión, enfrente de la computadora,
sin prestarle atención, sin embargo esto tiene profundas consecuencias. Lo ideal sería agradecer la comida,
permanecer tranquilos, darle tiempo, masticar, pedir que ese alimento nos
nutra, manteniéndonos sanos y con energía, estar presentes (como si fuera una
meditación). Sé que la mayoría no puede
hacer esto, pero haz algún pequeño cambie que redunde en tu beneficio.
-
Hinchazón,
dolores: hay muchas enfermedades que provocan estos síntomas.
Alimentos
antiinflamatorios: cúrcuma (para aprovechar la curcumina, debe cocinarse en
un medio graso, con un mínimo de pimienta negra), jengibre (rallado o en polvo,
da un delicioso sabor a cualquier cosa), ajo, brócoli, repollo, coles de
Bruselas, cebolla, vitamina C (el limón en ayunas es bueno, tanto como en
ensaladas), verduras y frutas (papaya, cerezas agrias, frutos rojos), pescados
grasos, semillas y frutos secos, aceite de oliva extra virgen, etc., en general
todo lo que es antioxidante.
Alimentos
fermentados: nuestra sociedad “moderna” ha desterrado los alimentos
fermentados, los cuales son indispensables para nuestra salud. Debemos volver a comerlos, en forma de
chucrut, pickles, kimchi, miso, tempeh, yogur, kéfir, kombucha, y, ¿por qué
no?, cerveza artesanal o premium. Debes
asegurarte que estos alimentos hayan tenido una fermentación natural y no
artificial, porque hay bastante mentira en muchos productos que están industrializados
y así no aprovechas los beneficios.
Personalmente, me caen mal los yogures y el kéfir de leche, por lo que
diariamente hago kéfir de agua y lo tomo también con las comidas, lo que ha
contribuido a una buena digestión.
Recomendaciones:
la homeopatía, la acupuntura, la gimnasia suave (estiramientos, t´ai chi, yoga
sin exigencias y con seguimiento personalizado, etc.), las caminatas, la
osteopatía, el buen humor, la alegría, los amigos, las actividades creativas,
la naturaleza, etc.
Productos
para los dolores: el aceite de árnica, Artrosil (tiene unos cuantos
ingredientes naturales y viene en roll on, lo cual facilita el masaje), los
parches y aceites chinos, la tintura de harpagophitum (20 gotas en una vaso de
agua, dos o tres veces por día, durante dos meses, descansar un mes y volver), las almohadillas eléctricas, etc.
-
Problemas
de la piel: una de las expresiones más normales y típicas. Tuve durante un tiempo unas manchas rojas por
distintos lugares, lo cual ocasionó tantos diagnósticos como profesionales
visité (una biopsia informó algo sobre una deficiencia en el colágeno). Finalmente, me harté, me despreocupé y se fueron
solas (una estrategia que suelo practicar y que me funciona bastante
bien). Creo que tienen que ver con las
fuertes manifestaciones de la Energía y que no requiere medicación. El remedio natural y universal para la piel
es el aloe (sabila)… y la paciencia y aceptación.
Hay dos
teorías acerca de la piel: una que dice que el excesivo lavado e higiene de
nuestros tiempos es contraproducente y otra que exige toda clase de productos
(jabones, champúes, antitranspirantes, cremas, perfumes, antibacteriales, etc.,
etc., etc.) como indispensables. La
enorme cantidad de químicos de los artículos industriales es atemorizante (lee
las etiquetas), pero siempre me inclino por el equilibrio (no soporto los
fundamentalismos), así que estudia, obsérvate y haz lo que más te convenga.
-
Ataques de
pánico: nunca los he tenido (sí de ansiedad, que he superado con
respiración consciente), pero una forma sencilla de controlarlos es respirando
dentro de una bolsa de papel hasta que se pase.
En su forma física, un ataque de pánico se produce por una
hiperventilación, por lo que inhalar anhídrido carbónico nivela el oxígeno y se
resuelve rápidamente (el aspecto psicológico requiere otro trabajo). Más información aquí.
-
ESCUCHA Y
HABLA CON TU CUERPO: finalmente, lo más importante. Como lo he expresado muchas veces, tu
organismo no es una máquina ni un envase descartable sin importancia. Estás en una dimensión material y tu cuerpo
es el enlace entre lo espiritual y lo físico.
Además de los avatares normales, desde hace un tiempo está sobrecargado
por masivas entradas de Energía que está cambiando la Vida como la
conocemos. Necesita mucho más descanso,
cuidado y agua que antes. Por otro lado,
está más abierto a la comunicación y sanación.
Habla
con él: busca momentos de silencio; escucha qué necesita y las razones por
las que está somatizando (investiga en libros como “Usted puede sanar su vida”
de Louise Hay o “La enfermedad como símbolo”, de Ruediger Dahlke); llega a un
acuerdo de no agresión mutua y de objetivos comunes (dile lo que deseas y lo
que vas a hacer para ayudar); libera ideas enquistadas acerca de lo que
significa estar enfermo o envejecer, típicas de la sociedad o de tu grupo
social.
Afirma
la salud y el bienestar: algunos síntomas y enfermedades (sobre todo, las
que vienen y van) son el resultado del proceso de espiritualización de la
materia que estamos realizando (igual, consulta y asesórate). Esto significa que debemos cambiar nuestros
conceptos acerca de lo corporal, entre otras cosas. Con el tiempo, el cuidado y la atención,
podremos estar más sanos, más jóvenes, más tiempo, más conscientes. Esta es la clave: activa tu consciencia y tu
vida cambiará.
Los términos y productos son de Argentina, averigua los de
tu país. Esto es el resultado de años de
investigación y experimentación: haz tu propia exploración, googlea, practica,
encuentra tus métodos. Lo que le
dediques a tu salud cuerpo-mente redundará en bienestar y plenitud. No te quedes en la comodidad de leer,
preguntar lo que tú puedes averiguar por ti mismo y/o archivar. Dedícate tiempo y sé amable contigo. Si has encontrado otras soluciones,
comparte.
Espero que estas sugerencias te sirvan. Aquí estoy para ayudarte a transitar estos
maravillosos y desafiantes tiempos.
Publicado por Laura Foletto en 11:51 0 comentarios
martes, 18 de octubre de 2016
Comunicación áurica: no eres una isla
¿No te pasó que, estando de buen humor,
comenzaste a hablar con un conocido y terminaste enojado? No discutieron y hablaron de tonterías,
pero tu ánimo cambió. ¿O que entraste a
un lugar y te sentiste mal, algo no te gustó, a pesar de que no pasó
nada? ¿O que te pusiste a conversar
con una persona que no conocías en el tren y te abriste como nunca, le
contaste cosas íntimas, y recibiste el consejo justo?
En una
sociedad materialista como la que vivimos, creemos que somos solo un cuerpo,
que estamos dentro de una burbuja, en la que nada entra ni sale, que somos
islas en medio de un archipiélago fijo y frío. Nada más alejado de la realidad…
Aunque leamos mucho sobre espiritualidad,
seamos religiosos o tengamos la teoría más elaborada, la verdad es que no
llegamos a darnos cuenta de las enormes implicancias de ser seres
espirituales transitando una experiencia humana. Nuestra aura (los cuerpos energéticos que están activos en esta
dimensión) es la responsable de todas nuestras relaciones y nos conecta de
formas inconscientes a Todo Lo Que Es.
Creemos que, cuando nos vinculamos con algo o
alguien, solo lo hacemos a través del cuerpo físico (la mirada, la voz, el
tacto, la actitud, la ropa) pero nuestro
campo electromagnético es el que atrae o rechaza, envía mensajes, dicta el
tono del contacto. ¿Cuántas veces
quisiste alejarte de alguien que recién conociste o acercarte hipnóticamente
a un lugar que sentías que te llamaba?
La
velocidad, la emocionalidad, la intelectualidad, la sexualidad, la salud, la
guía, la autoestima, muchas cosas (como los lazos kármicos, por ejemplo) son
intercambiadas en cada trato. Un individuo
pausado y lento baja la ansiedad de alguien rápido; una persona en un estado
violento altera a muchos a su alrededor; un bebé sonriendo calma a cualquiera
que se le acerque, despertando lo mejor de sí mismo; alguien pesimista y
abatido crea una nube negra en su entorno. ¿Sabes que puedes “captar” las ideas o
emociones de los que están cerca de tu aura (en el banco, en una reunión),
sin siquiera comunicarte?
Y ni
siquiera es necesario estar físicamente cerca para percibirlo. En este tiempo de virtualidad, una pantalla
es el medio para establecer relaciones antes inverosímiles, no porque no
fueran posibles (la comunicación aúrica está siempre disponible) sino porque
pudimos manifestarlas. ¿Acaso no
sentiste alguna vez que alguien a miles de kilómetros te necesitaba o le
había pasado algo antes de que te avisara?
¿La energía con que alguien habla o escribe, a través de Internet, no
te revela cómo está, qué le sucede?
Voy a evitar entrar al ancho mundo de las
comunicaciones interdimensionales porque eso ya es insondable e
inabarcable. Desde los “bichos” del
bajo astral de cuarta dimensión hasta los Seres de Luz, existe una vastedad
de formas, lugares y posibilidades que no entran en nuestra imaginación más
desbordada y las circunscribimos a la ciencia ficción para entretenernos… o cegarnos ante lo ineludible.
No queremos pensar en eso, estamos demasiado
ocupados en las exigencias que el Ego ha establecido como importantes: todo
lo material. No deseamos considerar que somos responsables del estado del planeta
(y más allá), que cualquier cosa que pensamos, sentimos, hablamos, hacemos,
entra al campo de energía de la Humanidad y provoca consecuencias. Mejor seguir creyendo que somos islas. Pero
resulta que somos los primeros perjudicados por esa falsedad: al no
tomarlo en cuenta, no nos cuidamos de las auras de personas y sitios que nos
dañan; convocamos aquello que más tememos; atraemos situaciones a las que nos
abrimos sin saberlo; nos enfermamos en lugares nocivos para nosotros; nos
enganchamos en velocidades, emociones, ideas, que no son armónicas para
nuestro diseño; no escuchamos al cuerpo, los instintos, la intuición, los
gustos, la guía interior; nos sentimos solos y perdidos en un universo
desolado.
Todos
somos Uno. Imagina que eres una
gota en el océano; sigues siendo individual y único pero parte indivisible de
esa poderosa corriente. Aprecia tu
singularidad y disfruta el todo, siendo consciente de que continuamente estás
conectándote con la Vida. Haz silencio y escucha el sonido de la
Luz.
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Publicado por Laura Foletto en 14:39 0 comentarios
jueves, 13 de octubre de 2016
¿Por qué desprecias tus cualidades y anhelas lo que eres ni tienes?
Cuando era
joven, en una sesión con la psicóloga, mientras me estaba quejando de mis
pocas ventajas y de mis muchos defectos, ella me interrumpe y me dice que yo
no estaba viendo la realidad porque poseía cantidad de cosas buenas. “Dime una”, la reté. “No caes bajo presión; por el contrario, en
los peores momentos sacas la solución perfecta”. “¡Ah, eso es una tontería!”, le
retruqué. “En lo más mínimo. Para muchas personas es imposible, siendo
vitalmente necesario a veces. Lo que
sucede es que tú no valoras lo que te es fácil o te ha costado poco asimilar
(lo cual pasa seguido porque eres muy rápida para aprender, otra virtud que
tienes). Te disminuyes al no apreciar tus cualidades y solo te concentras en
lo que no tienes o no puedes (por ahora).”
A mi turno,
siendo terapeuta y coach, se repite la situación con mis consultantes: cuando
luego de las largas recriminaciones acerca de sus fallas, les pido que digan
algo agradable de ellos, se quedan en silencio, un largo e incómodo silencio,
roto por algún: “soy bueno” (un paraguas socialmente aceptado que parece
contener alguna clase de beneficio).
En su opuesto,
un paciente de unos 65 años, que tenía una terrible opinión de sí mismo, se
soltó un día con esta declaración lapidaria: “uno no debe trabajar ni vivir
con lo que le es fácil; se tiene que forzar a aprender lo que no le gusta ni
le resulta natural porque eso tiene mérito; lo otro no sirve”. Sorprendida, le cuestiono: “con tu
criterio, Diego Maradona no se tendría que haber dedicado al fútbol porque
era excelente en eso; debería haber sido… neurocirujano; con lo cual, nos
hubiéramos perdido de un genial jugador y quizás hubiéramos tenido un mal
cirujano más”. Ahí comprendí la razón
de que se criticara y exigiera sin parar.
Esta “definición” de nuestra identidad fue
generalmente un recorte amorfo y apurado, producto del cierre abrupto de las
dudas y ansiedades que implica el crecimiento. La adolescencia y la juventud son los
períodos más estresantes de la vida y la mayoría opta por tomar algunos
aspectos, esconder y negar los más negativos o desafiantes y conformarse con
una pobre imagen amputada a la que denomina Yo, clausurando así la verdadera
riqueza y profundidad que representan el autoconocimiento, la evolución y la
plenitud.
Cuando comencé
a estudiar Diseño
Humano, me resultó revelador cómo funciona este mecanismo: los Centros Definidos en nuestro
diseño son fijos y por lo tanto confiables, están siempre disponibles,
activos y funcionando: son lo que verdaderamente somos. Sin embargo, nos identificamos con los Centros Sin Definir, que están
abiertos al condicionamiento de los demás y son nuestros aprendizajes. Ellos constituyen el No-Ser, lo cual solo
nos pueden traer dolor. Una verdadera
paradoja, colmada de ironía y sufrimiento.
Un ejemplo:
supongamos que una persona tiene los Centros Ajna y Cabeza Sin Definir, por
lo que tiene una enorme presión por saber, comprender y hallar sentido. Se dedica incansablemente a estudiar, leer,
ir a talleres, llenarse de información, hasta constituirse casi en un
intelectual, lo que considera su gran realización y orgullo. Lo que no sabe es que está condicionado
constantemente por los pensamientos de los que están en su cercanía y por la
idea de que encontrará las grandes respuestas en la mente (la cual no está
preparada para ello). ¿Y cuál es la paradoja? Que probablemente tenga el Centro del Plexo
Solar Definido y su vida (y su Autoridad Interna) dependan de sus emociones. Así, desprecia lo que es fundamental para
concentrarse en lo que no puede darle confianza, fluidez ni soluciones.
¿Cómo podemos ser felices si no nos
conocemos, si no nos aceptamos, si no nos apreciamos y amamos? Este es el estado de las cosas: lucha,
vacío, desdicha, consumismo. En la
sencillez de ser uno mismo está la clave, porque así cada uno deja de
pelear/se y vive en paz, aportando sus cualidades al Todo y disfrutando la
riqueza compartida. Nos falta mucho
para ello, pero… ¿no es hora de comenzar?
Comienza por ti mismo, aquí y
ahora.
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Publicado por Laura Foletto en 13:45 0 comentarios
jueves, 6 de octubre de 2016
Cierres y renovaciones al máximo: sé amable contigo
La semana pasada, publiqué en mi Facebook
algunas entradas acerca de cómo estamos transitando este año y muchos se
hicieron eco del estado (calamitoso) en que se encuentran (pongámosle un poco
de humor).
En numerología, el 2016 es un año 9, lo que implica el fin de un ciclo con sus
consiguientes cierres, pérdidas, despedidas, balances y el establecimiento de
nuevas metas. Muy probablemente, te hayas replanteado
bastante cosas en estos meses, sea porque el panorama cambió, sea porque ya
no vibrabas con lo que había, sea porque algo comenzó a aparecer en tu
consciencia, todavía no muy definido pero ciertamente fuerte.
Ha sido movilizador porque no se trató de asuntos
banales sino de un mar de fondo que se levantó y subió a la superficie
incontrolablemente. Y esto último es lo que más sacudió: el control. El Ego pretende fiscalizar todo por miedo,
inseguridad y desconfianza, por lo que busca establecer bases estables y
cómodas para operar siempre del mismo modo (básicamente es una máquina
repetitiva). Como la vida es cambio y
evolución, en algún momento esas plataformas ya no sostienen tanto movimiento y
se resquebrajan.
Cuando lo nuevo es tan radical y original, no hay
más remedio que confrontarlo a pesar de todas las resistencias que
opongamos. No involucra modificaciones cosméticas: tu estructura más esencial está
mutando, conmovida por masivas efusiones de Energía. Tus cuerpos físico y emocional están siendo
reformados hacia nuevas instancias de integración dimensionales. Tu mente está tratando de aceptar y adaptarse
a conceptos que, quizás conocía teóricamente, pero que no habían sido
in-corporados.
¿Cómo se manifiesta esto? Con cansancio, síntomas (tensión, alergias,
mareos, dolores), enfermedades, “accidentes”, sensibilidad extrema y/o
insensibilidad, hartazgo, irritabilidad, necesidad de soledad y escucha
interior, cambios en la alimentación y en el trato corporal, desgano, mal
dormir y sueños extraños, apertura a otras capacidades, replanteos
existenciales, pérdida de interés en objetivos y relaciones largamente
sostenidos, surgimiento de otros deseos, etc.
Un paquete variado y desafiante…
¿Cómo
transitarlo? Con amabilidad. Sí, es difícil. Nuestra sociedad (regida por el Ego) quiere
todo YA, sin proceso, sin espera, sin sustento.
Lamento informarte que esto es un asunto del Ser, a quien poco le
importa lo que deseas pero sí lo que necesitas.
Te maltratas, te exiges, te fuerzas, te agotas y nada pasa. No es ese el modo: aprende a aceptar, a tener
paciencia, a perseverar, a conectarte con el cuerpo y la Tierra, a incluir
todos tus aspectos, a ver las relaciones con Todo Lo Que Es, a confiar en ti
mismo y en la Vida.
¿Te diste cuenta de que esas son cualidades de lo Femenino? Eso también es parte del proceso, ya que
necesitamos equilibrar la preeminencia de lo Masculino durante siglos. Los atributos de la energía femenina han sido
denigrados y socavados por tanto tiempo que nos cuesta siquiera considerarlos
como buenos propósitos (incluso a las mujeres, que nos hemos masculinizado
bastante). ¿Para qué colaborar si
podemos competir, para qué integrar si podemos combatir, para qué esperar si
podemos arrebatar, para qué ser cordial si podemos forzar?
Tanto hombres como mujeres debemos replantearnos la fuerza del Amor. En el fondo, creemos que es débil, tonto, que
no soporta el embate de lo malo y dañino.
El Amor es poderoso e inteligente, disuelve sin necesidad de luchar,
empodera sin acorazar e insensibilizar, es vulnerable sin debilitar, moviliza
sin agotar, crea sin destrozar. Por eso,
sé amable contigo. Este proceso no es de unos meses, es para
siempre, porque está moviendo las bases mismas de la vida en la Tierra. Sé parte de la espiritualización de la
materia poniendo consciencia, entusiasmo, amor en tus interacciones contigo
mismo, con los demás, con tus asuntos, con el planeta, con la Vida. No hay nada que lo valga más. Eres
una chispa de Dios, latiendo en un corazón humano.
Publicado por Laura Foletto en 14:11 0 comentarios
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