Esta semana, tuve una detención abrupta con respecto a lo que venía trabajando acerca de la abundancia. Comencé a cuestionarme qué estaba creando y me descentré unos días. Entonces, una mañana, me levanté y alcé la vista hacia una alegría del hogar que tengo encima de la heladera (pongo plantas adonde sea) y lo vi:
El símbolo del infinito, de la abundancia, el 8 acostado. Un mensaje del Universo para que recordara su provisión continua y me planteara qué defensas y resistencias estaba activando. Fue muy revelador y rico. ¡Gracias, Vida!
sábado, 18 de octubre de 2008
Mensajes...
Publicado por Laura Foletto en 20:28
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1 comentario:
El camino me condujo hasta aquí, para darme la respuesta que estaba necesitando.
Gracias,muchas gracias por tu servicio.
No estamos solos, SOMOS UNO.
Namasté.
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