Recién había terminado de merendar, mientras miraba una película, sentada en mi cama y, en un momento, miro la bandeja frente a mí... y fue como una iluminación instantánea.. sentí la maravilla de estar viva, la celebración del misterio, la gratitud por todo, el milagro de lo pequeño, mi inclusión en el esquema... no puedo explicarlo...
miércoles, 9 de diciembre de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
¡Maravilloso! ¡Te has iluminado! ¡Lo conseguiste! ¡Ya tienes todas las respuestas! Dime, ¿cuándo me va a tocar la lotería? Je je. Ya en serio: gracias por compartirlo. ¡Yo también quiero!
Yo también quiero, Alberto, todas las respuestas... :-)
Ese destello es solo eso: un destello, la conexión con el espíritu en un instante y así dura. Las respuestas siguen estando en el diario vivir, porque ese es el juego que jugamos aquí.
Gracias por tu comentario. Un abrazo.
Que bonito es cuando pasa eso!!! Un segundo de cosquillas y regocijo!!! Tan bonito!!!
Sí, mujercita pastrulita, ese segundo es maravilloso. Estoy tratando de que se convierta en minutos, horas, días... soy ambiciosa!! jaja!
Gracias. Besos.
Publicar un comentario