martes, 6 de enero de 2009

Disfrutando la patología

Observando con una prima los "rituales" de mi padre para hacer cualquier cosa, nos reíamos de algunos rasgos característicos de los Foletto. Uno de ellos es cierta manía en los detalles. Hace mucho tiempo, me di cuenta de esta especie de neurosis obsesiva, lindante con un Trastorno Obsesivo-Compulsivo (para usar términos psicológicos). Si bien lo trabajé y ya no me molesta, algo quedó. Pero, me parece que uno tiene que usufructuar la patología.

He notado grandes "enfermedades" psicológicas en muchos genios o personalidades importantes y, justamente, éso era lo que los destacaba o hacía de ellos innovadores o pioneros. Si uno puede utilizar la parte positiva de esas peculiaridades (disminuyendo el perjuicio), es posible mejorar la propia vida de formas prácticas y bellas.

He aprovechado mi obsesión para enriquecer hermosamente lo que hago (escritos, presentaciones, mi casa, la ropa, etc.), manteniendo a raya el Ego con sus perfeccionismos vacíos y estériles.

1 comentario:

Concha Barbero de Dompablo dijo...

Sabia manera de canalizar las energías.