lunes, 3 de enero de 2011

Propósitos y concreciones

Para Navidad, te pregunté si te habías planteado tus propósitos para el 2011: para tus relaciones, trabajo, creatividad, salud, interior, para la Humanidad y la Tierra. Quizás, te preguntes para qué si ya lo hiciste otros años y no lo cumpliste. Si es tu caso, veamos algunas razones.

La primera puede ser porque los escribiste y los olvidaste en un cajón… simple, sí? Entonces, ponlos en donde puedas tenerlos a mano y verlos frecuentemente. Lo que te permite esto es enfoque. Cuando no encauzas concientemente tu energía, tiendes a la inercia. O sea que continuarás con más de lo mismo y, por supuesto, con las mismas quejas de que nada cambia, de que tu vida es una repetición mediocre, de que el mundo no te da posibilidades, etc. No subestimes el poder de la inercia y del estancamiento del Ego en sus estructuras. A menos que diseñes nuevos rumbos y trabajes para ello, nada nuevo sucederá.

Esto requiere constancia y dedicación (por eso, planteé el Curso de CREACIÓN INTEGRAL con Entregas semanales). Si te propones un objetivo y lo olvidas o lo cambias frecuentemente porque no ves resultados inmediatos, jamás lo lograrás. Recurre a la confianza: cuando plantas una semilla, no cavas la tierra continuamente para ver si está creciendo; tienes fe en que en algún momento aparecerá el brote. Nutre a tu semilla y a tu planta todo el tiempo.

Te recordé que te propongas metas interiores. Haces largas listas de objetivos externos, pero no concibes cómo conseguirlos. Y no me estoy refiriendo a estrategias y planes sino a que la única forma de hacerlo es que cambies tus ideas y actitudes. Lo que te impidió concretarlas no fue el exterior sino el interior: tus carencias, limitaciones, traumas, emociones. Por eso, ten en cuenta tu transformación interna porque ello interactuará con lo externo y lo movilizará.

Esto es lo fundamental, verdaderamente, de proponerte metas. ¿Le importa a tu alma que cambies de trabajo o de automóvil, que bajes de peso, que tengas pareja, que ganes más dinero? No. Ella quiere tu evolución y todo esto la tiene sin cuidado. Lo que verdaderamente interesa es en lo que te vas transformando mientras lo logras. Así, te irás conociendo, expandiendo, creando, intercambiando, entregándote al devenir de tu vida interior, que se manifestará en el exterior de formas cada vez más armoniosas, ricas, alegres, amorosas.

Mi 2011 está pleno de preciosas realizaciones. Este año será clave para el afianzamiento de la Nueva Energía y quiero hacer mi parte, luego de tantos años de trabajo interno y externo para lograrlo. Espero contar contigo. Crea el mejor año que puedas soñar. Para inspirarte, aquí va una hermosa canción. ¡A volar!


CREO QUE PUEDO VOLAR
Solía pensar que no podría continuar
y que la vida no era más que una horrible canción.
Pero, ahora que sé el significado del verdadero amor,
me apoyo en los brazos eternos.
Si puedo verlo, entonces puedo hacerlo;
si solo creo, no habrá nada más.
Creo que puedo volar.
Creo que puedo tocar el cielo.
Pienso en eso cada noche y día.
Extenderé mis alas y volaré lejos.
Creo que puedo elevarme.
Me veo corriendo a través de la puerta abierta.
Creo que puedo volar.
Veo que estuve al borde del desastre.
A veces, el silencio puede hacerse tan fuerte.
Hay milagros en la vida que debo alcanzar.
Pero, primero debo saber que empieza dentro de mí.
Si puedo verlo, entonces puedo hacerlo.Si solo creo, no habrá nada más.

2 comentarios:

johnvers dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Laura Foletto dijo...

Tu emoción, de retorno, me inspiró a mí... qué hermoso!! Gracias!!
Un cálido abrazo.