martes, 22 de septiembre de 2015

Las resistencias y los beneficios del cambio

Cuando decidimos cambiar (o no tenemos más opción, como está sucediendo bastante ahora), se presentan ciertos desafíos.  Voy a tratar algunos:

  • Las expectativas: muchos se paralizan frente a una decisión porque sopesan indefinidamente lo que pueden perder.  Imaginan distintos escenarios y hacen hincapié en lo que dejarán de tener o en lo que no pasará y así basan la elección en el  miedo y la carencia y en su incapacidad para procesarlos.  No podemos obviar que cualquier situación tiene aristas positivas y negativas, pero estas últimas tienen que ser aceptadas y negociadas y, sobre todo, debemos ser impulsados por el entusiasmo de lo que obtendremos, de la expansión que disfrutaremos, de las novedades que movilizarán nuestra vida hacia lo mejor de nosotros.

  • Las pérdidas: cuando hacemos una elección, las demás posibilidades desaparecen.  Esto hace que algunos permanezcan en un limbo de indecisión porque de esta forma tienen la quimera de que todas las oportunidades siguen vivas y posibles.  En principio, esto no es cierto porque con el tiempo muchas se van desvaneciendo solas, mientras uno sigue detenido y frustrado.  Por otro lado, nos perdemos de los regalos del compromiso: solo cuando abrazamos decididamente algo, recibimos su fuerza, su belleza, su profundidad, su conexión, su abundancia, lo que sea que esa posibilidad abre y despierta con su presencia.


  • La volatilidad: al existir en un mundo veloz y variable, pasamos a una y otra cosa, una y otra vez, en la creencia de que las poseemos y las disfrutamos.  En la mayoría de los casos, esto no es más que una ilusión.  Se suceden lugares, personas, cursos, diversiones, etc., pero pocas dejan un sedimento verdadero.  Por un lado, el placer necesita tiempo, precisa morar en el cuerpo deliciosa e intensamente; es la diferencia entre un vistazo por la ventanilla del auto y estar sentado en una playa mirando un ocaso.  Por otro lado, nada se aprende sin profundizar y practicar; la mayoría de mis consultantes han leído y hecho cursos interminablemente pero tienen internalizado poco de eso en sus vidas cotidianas.  Al anular al cuerpo y priorizar a la mente, todo va a su ritmo y, al final, el físico termina llamando la atención contundentemente.

  • Las decepciones: al cambiar de dirección, algunas personas se verán afectadas.  Muchos no pueden soportar esta situación e infantilmente se quedan atados a sus reclamos y extorsiones, retrasando su evolución (y la de ellos).  Es necesario comprender que algunos no aprobarán nuestras decisiones y que todos nos debemos mover hacia un mayor nivel de responsabilidad y creatividad.  Al inicio, nuestra resistencia se liga a la de los demás y tendemos a echarles la culpa, para no hacer frente a nuestros propios miedos y dudas.  Luego, una vez esclarecidos, debemos comenzar y esperar que ellos también crezcan y maduren.  El detener nuestro proceso conlleva la detención de la de todo lo demás, porque estamos unidos a la Creación de manera indisoluble.


Hacer algo distinto tiene sus dificultades, pero generalmente no son necesarias acciones heroicas ni grandiosas en el exterior.  Son imprescindibles los pequeños cambios internos de cada día, que van cimentando un trayecto seguro, sólido y entusiasta.  Eso irá abriendo las posibilidades externas, de acuerdo a tu capacidad, vibración e intención incrementadas.  Da el paso y la Vida te irá abriendo el camino en cada pisada.  

martes, 15 de septiembre de 2015

Los muchos tipos de Almas Gemelas

Constantemente, escucho sobre este tema.  Cuando vi este artículo de Anne Wade, me pareció muy esclarecedor, por lo que lo traduje y te lo comparto.  El original está en este blog.  Espero que te ayude.

Ah, Almas Gemelas! - esas personas afortunadas que creemos están hechos el uno al otro como si compartieran una conexión mística mágica. Parejas felices que parecen más compatibles y contentos en todos los sentidos. Sin embargo, a pesar de que el romance a menudo viene a la mente en primer lugar, hay tantas clases de almas gemelas como tipos de amor o tipos de relaciones.

El propósito de la vida humana es volver al amor incondicional. Sentimos afecto y cariño (Storge), amistad (phileo) y romance (Eros) en función del tipo de relación a medida que aprendemos a amar incondicionalmente (Agape) en cualquier circunstancia.

Y ahí es donde entran las almas gemelas. Nuestras familias del alma están aquí para ayudarnos a aprender el amor incondicional. Se necesita más que el romance para cumplir esa misión y nuestras almas gemelas toman cualquier tipo de rol humano que sea necesario para nuestro crecimiento. El objetivo es ayudarse mutuamente a  despertar y sanar a fin de que cada uno pueda finalmente volver a unirse con su alma gemela. Algunos de esos roles son cariñosos (amigos, familiares, amantes y amados de todo tipo). Otros son dolorosos o desagradables. Esas relaciones son más como papel de lija en madera fina, sacando afuera la belleza y la fuerza de la veta a través de la fricción y el dolor. Todos son necesarios.

Nuestras familias de alma gemela viajan con nosotros por el tiempo y el espacio, a través de tantas vidas como sean necesarias para nuestro despertar. Nos reunimos una y otra vez para sanar conjuntamente patrones y temas viejos, hasta llegar al nivel del alma. Eso significa que cualquier cosa que necesite sanación saldrá a la superficie en cada tipo de relación de alma gemela. Estar con un alma gemela no nos protege de ser humanos. De hecho, lo contrario puede ser cierto a medida que esas necesidades se revelan. Estar con un alma gemela nos da un medio para hacer frente a esas necesidades.

Las relaciones que creamos con almas gemelas, románticas y de otro tipo, se dividen en cuatro categorías principales, dependiendo de la función que el alma está jugando en esta vida particular:

Karmic Mates (Compañeros kármicos)
  • Almas gemelas kármicas se unen específicamente con el fin de enseñar o trabajar un problema. Pueden ser un alma con quien tenemos un asunto pendiente o un trauma o una necesidad compartida. Relaciones kármicas pueden venir a nosotros como amigos y familiares o enemigos y opresores o incluso como gente de paso. Cómo se presentan es menos importante que la razón por la que se presentan. Son a veces difíciles o desafiantes, aunque no tienen porqué serlo. Por lo general, cuando una relación es espinosa, es porque estamos ignorando o negándonos a reconocer algo en nosotros mismos. Cuando reconocemos y aceptamos ese pedazo de la sabiduría, podemos llevar la relación a un territorio más agradable o simplemente soltarla. A veces hay malos sentimientos, pero eso también es algo que nos da la oportunidad de trabajar a través de ella. ¿Alguna vez hiciste conexión instantánea con alguien sólo para que la relación termine mal? Tal vez sigues teniendo la misma relación "mala" una y otra vez. Eso es un indicio de una lección fundamental que tu alma necesita y quiere aprender. Vas a seguir atrayendo esa lección, posiblemente en la forma de muchas relaciones similares, hasta que lo comprendas. Acoger con beneplácito la lección le ayudará a completar la sanación y seguir adelante.
  • Todas las relaciones kármicas no son desagradables. Es igualmente posible aprender algo fácilmente y con alegría. El punto principal de las relaciones kármicas es que vienen con un propósito y cuando ese propósito (la enseñanza, el aprendizaje) se lleva a cabo por lo general terminan.
  • Los compañeros kármicos no hacen buenas parejas románticas, a pesar de que la atracción puede ser fuerte. Si entendemos por qué han aparecido, podemos apreciar lo que son y no esperar algo más o diferente de ellos.

Ego Mates (Compañeros de Ego)
  • Ellos entran en nuestras vidas cuando todavía estamos preocupados por cómo nos vemos frente a los demás y lo que los demás piensan de nosotros. A veces se clasifican como un subtipo de la relación kármica, pero creo que su propósito es específico y suficiente para justificar su propia clasificación. Navegar por ellos es una parte normal de la evolución de nuestra alma.
  • Los Compañeros del Ego están preocupados con el hecho de si la otra persona los hace "ver" bien. ¿Hacen las cosas bien, se comportan de la manera correcta, van a los lugares correctos, pasan el rato con la gente adecuada, usan la ropa adecuada, viven en las casas correctas, ganan suficiente dinero, tienen la carrera correcta?  Los Compañeros de Ego son fácilmente avergonzados cuando su pareja no está a la altura de estas expectativas, incluso en formas menores que hacen estas relaciones condicionales, frágiles y en última instancia insatisfactorias. Es como si estos compañeros estuvieran navegando el equivalente del alma de la pubertad.
  • Tampoco hacen buenas parejas románticas, pero a menudo se encuentran en ese papel. Ellos todavía no entienden el verdadero significado de complementarse, por lo que se preocupan por cosas superficiales y pierden la conexión más profunda que anhelamos. La mayoría de las relaciones del Yo son transitorias, yendo y viniendo, mientras se hacen sentir mejor entre sí - o no. Debido a que los Compañeros de Ego están buscando la realización fuera de sí mismos y todavía no entienden que el amor es un trabajo interno, estas relaciones son propensas a hacer trampa.

Compañeros de Compañía  (Companion Mates)
  • Ellos son probablemente la visión común más cercana de las almas gemelas. Estas son las almas que han accedido a disfrutar de una relación cálida y amorosa a largo plazo. Comparten la vida por una razón específica, como la crianza de niños o ampliar su propia comprensión del amor genuino. Aunque a menudo son parejas románticas y excelentes además, también pueden ser familiares o amigos cercanos. Como con los Compañeros de Compañía se enseña, se aprende y se crece, se trata de un esfuerzo de amor compartido.
  • Estas relaciones son perdurables, por lo que a veces duran toda la vida. Se caracterizan por ser mutuamente respetuosos, cariñosos, íntimos y comprometidos, honestos, seguros y amorosos. La palabra clave es "mutuo" y eso se focaliza cuando hay tiempos de dificultad, privación o conflicto. Ellos no ignoran los altibajos naturales de las relaciones humanas, pero se han puesto de acuerdo para navegarlos juntos. Ambos están dispuestos a poner energía y esfuerzo en la relación según sea necesario para alimentar una atmósfera amorosa saludable.
  • A pesar del cuadro pintado por los cuentos de hadas y películas, los Compañeros de Compañía no siempre comienzan con una intensa pasión emocional o física, aunque muchos sienten un agudo sentido del reconocimiento al reunirse. Su amor es más profundo que el enamoramiento y puede florecer con el tiempo, incluso si se "reconocieron" instantáneamente. A diferencia de las otras clases de relaciones, no se sienten amenazados por los fugaces momentos de alta o baja pasión. En cambio, tienden a sentirse firmes y estables, incluso en circunstancias adversas.
  • Aun así, es posible que los Compañeros de Compañía crezcan separados cuando uno decide seguir su camino individual. En ese caso, los verdaderos compañeros permitirán amorosamente a su socio seguir su propio camino, a menudo siguiendo como amigos a pesar de la terminación de la relación.



Llamas Gemelas o Almas Gemelas (Twin Mates o Soul Mates)
  • La definición popular de Almas Gemelas es la siguiente: Tu Llama Gemela, a veces llamada Alma Gemela, es literalmente la otra mitad de tu alma. Cuando las almas fueron creados originalmente, contenían ambos atributos masculinos y femeninos. En algún momento, cada alma se dividió en gemelos masculinos y femeninos, cada uno completo en sí mismo, viviendo por separado para reunir la experiencia humana y de forma individual equilibrar sus aspectos femeninos y masculinos internos. Cuando te encuentras con tu llama gemela, es probable que sientas una profunda sensación de volver a casa, como si te hubieras encontrado a ti mismo solo que "mejor." Mi opinión personal es que tu alma gemela no es otra persona en absoluto. Eres tú y ese sentido de regreso al hogar está despertando la comprensión de que tu alma estuvo dentro de ti todo el tiempo. Piénsalo de esta manera - nos gusta decir "Todos somos uno" sin pensar realmente lo que eso significa. Significa que hay solo uno y que tú lo eres. Esto es lo que Ram Dass tiene que decir sobre este tema. 
  • Aquellos que adscriben a la definición popular de Llamas gemelas creen que se asemejan a los Compañeros de Relaciones, con atributos específicos adicionales. Los socios se reconocen entre sí como iguales y co-creadores y se tratan en consecuencia. Comparten objetivos de vida compatibles complementarios y sus naturalezas espirituales están sincronizados. El nivel de comodidad que sienten entre sí es un reflejo del sentido compartido de regreso a casa. Crean una zona segura finamente sintonizados a través de su apoyo mutuo y aliento. Ellos se estiman entre sí y creen en el valor de cada individuo, mientras que claramente ven su fuerza juntos. Han aprendido o casi aprendido las lecciones de su pasado y ahora están abiertos a recibir amor incondicional. Sienten un amor pacífico y alegre que no está arraigado en el enamoramiento o la química. Es una hermosa visión del compañera ideal.
  • A diferencia de otros tipos de almas gemelas, las Llamas Gemelas no comparten conscientemente múltiples vidas. En la creencia popular, finalmente encarnan juntos cuando ambos están casi listos para "graduarse". Hasta ese momento, pueden turnarse para ser humanos mientras el otro queda en el reino espiritual para guiar, proteger y ayudar. Cuando finalmente encarnan juntos, uno puede exhibir capacidades de canalización, a fin de mantener esa conexión directa con el reino espiritual para el beneficio de ambos. Mi propia creencia, así como la de Rumi, Ram Dass, y otros seres mucho más evolucionados que yo, es que tu gemelo eres tú, el "tú" del que no has sido consciente y que ha estado dentro de ti todo el tiempo. Eso significa que han compartido cada vida juntos, pero no se daban cuenta. Despertar a esta verdad es lo mismo que descubrir a tu gemelo.
  • Las Llamas Gemelas, ya sea en forma de compañero esencial o de despertar a Sí mismo, a menudo se sienten llamados a algún tipo de trabajo espiritual, que se  puede definir muy ampliamente como trabajo directo espiritual, trabajo humanitario, o simplemente llevar la sensibilidad del trabajo espiritual a cualquier trabajo que estuvieran haciendo.
  • Cualquier cosa que todavía necesite sanación en cualquier aspecto de los Mellizos, independientemente de cómo se los defina, se va a plantear, pero hay una sensación subyacente de que pueden y los van a capear unidos, lo que proporciona la seguridad, la claridad y la fuerza para hacer frente a estas últimas lecciones. Es seguro para cada aspecto entrar en sus rincones oscuros y dirigirse a todo lo que está al acecho, sabiendo que través de esa seguridad, la luz se extenderá a lo largo de ambos.

Cada tipo de relación de alma gemela es esencial para la sanación definitiva. Valorarlos en los papeles únicos que juegan ayuda a evitar el sentimiento de victimización que puede surgir con las experiencias de sanación. Porque no importa que tan "malas" cosas pueden aparecer en un momento humano, todo está sucediendo en beneficio de nuestra alma.

miércoles, 9 de septiembre de 2015

Superarte es evolucionar, no luchar

Frecuentemente, en la primera sesión, algunos consultantes suelen contar su historia, describiéndose a sí mismos como “sobrevivientes”.  Refieren circunstancias traumáticas (hasta terribles) que les han sucedido una y otra vez, pero que han logrado “superar”.  Se sienten bien al desempeñarse con un ánimo ganador y con haber vencido las dificultades.

¿Qué los trae entonces a una terapia?  Están cansados.  En esa pelea, se han hartado y agotado.  Han perdido no solo energía y motivaciones, sino también personas y bienes.  Paradójicamente,  muchos no piensan en cambiar de actitud sino en fortalecerse para continuar el combate.

Se han identificado con ese aspecto de ellos mismos y están orgullosos.  Son los fuertes, los luchadores, los que no se rinden, los resistentes.  Y no está mal.  El problema reside en cómo lo aplican.  Si hacen hincapié en la tenacidad contra los inconvenientes, terminan convocando situaciones para ponerlo en práctica.

Cuando uno privilegia alguna condición en detrimento de otras, ella atrae las circunstancias para protagonizarlas.  Es como un actor especializado en determinado rol: lo llaman para ese solamente.  Ya conoce cómo encararlo, cómo enfrentar a los otros y a las situaciones.  Con el tiempo, se le hace tan familiar que cree ser ese rol y pierde contacto con las otras posibilidades.

Además de los sobrevivientes, están las víctimas (que caen de abusador en abusador), los perdedores (que dilapidan un negocio tras otro, por ejemplo),  los triunfadores (que se aterran de quebrantar su racha ganadora), los hiperactivos (que no pueden descansar y conectarse consigo mismos), etc.


Cada uno de esos roles, tiene atributos positivos que se pueden aprovechar en una nueva actitud en lugar de desgastarlos en una misma postura enquistada y perimida.  En el caso del sobreviviente, superar no significa hundirse constantemente en circunstancias duras para avanzar sino en dejar de convocarlas.  Algunos tienen necesidad de probarse frente a la adversidad en vez de usar esa fuerza en construir una vida completa y tranquila.  Muchos han tenido familias con historiales de lucha y no conocen otra forma de desarrollarse.  Como decía, otros encuentran identidad en ello y deben ampliar su sentido de sí al integrar otros aspectos igualmente importantes y nutritivos.

Sucumbir periódicamente en etapas conflictivas indica una falta de aprendizaje de una  determinada lección.  Caer al fondo una y otra vez no es la forma correcta de resolverla, porque a la larga es frustrante y agotador y demuestra la impotencia en encontrar la respuesta.  Es la muestra de que la superación está atada al sufrimiento y la pelea. 



Una mejor forma es detenernos y analizar, utilizando la conciencia como monitor del proceso.  Al observar los condicionamientos personales, familiares y sociales, podemos liberar las actitudes repetitivas y dañinas y encontrar nuevas soluciones.  Tendemos a premiar a los que se esfuerzan y luchan y así nos perdemos de otras formas de evolucionar.  Estamos en tiempos de permitir el poder innato de crear vidas plenas y abundantes, afirmando la vibración esencial de cada uno y no los modelos impuestos para manipularnos. 


Para ello, es necesario conocernos y confiar, visualizando un mundo distinto y ayudando a fundarlo.  Ahora mismo, todos estamos golpeados por las noticias de  infortunios en distintos lugares del planeta.  Sufrir y quejarnos no los resuelven.  Solo el trabajo interior para asumir actitudes amorosas, pacíficas y creativas que llevemos a nuestro entorno contribuirá al nacimiento de un mundo más justo y humano.  Buscar culpables no nos libra.  Responsabilizarnos de nuestra parte y trabajar en grupos trae contribuciones mejores.  Todos Somos Uno.

miércoles, 2 de septiembre de 2015

Tú eres tu propia creación: acéptala y celébrala

“¡Qué estúpido que soy!”.  “Nunca voy a lograr ese ascenso”.  “No sirvo para nada”.  ¿Cuántas veces decimos cosas como esas, o peores?  Nos destratamos constantemente.  Insultos, humillaciones, desvaríos, dudas, autoprofecías cumplidas, son el telón de fondo de nuestras vidas.  ¿Es posible desarrollarnos así?

Nos recriminamos los defectos, nos exigimos las faltas, no nos reconocemos las cualidades.  Vivimos deseando ser otros, debilitándonos en cada pensamiento, sufriendo en cada emoción.  La religión y la cultura han puesto modelos inalcanzables o imposibles, que no registran el aprendizaje y la transformación como motores.  “Debemos” ser buenos, exitosos, múltiples, excelentes en cada cosa, prósperos, felices.  ¿Quién puede conseguir todo eso, sin renunciar a su individualidad, a su esencia?

Nuestro interior choca contra tanto mandato y aparece el drama.  Y el drama es proporcional a la magnitud del Ego.  Cuanto más Ego, más desdicha y resistencia.  Esta sociedad está construida y manejada a través del Ego, está desacralizada, salvo en lo exterior y superficial.  Es común el Ego “espiritualizado”, con mucha teoría y rituales, pero sin incidencia en las vidas cotidianas.

Nos cuesta enraizar la espiritualidad.  Quizás, porque hemos separado cuerpo y alma.  Lo material por un lado, lo anímico por otro y un especialista para cada cosa.  Hemos diseccionado todo hasta lo ínfimo para encontrar que es igual a lo cósmico.  Pero todavía no hemos podido integrarlo concretamente. 

Al rechazarnos y pelearnos con nosotros mismos, ¿lo conseguiremos? Claramente, no.  Sin embargo, lo seguimos haciendo.  Resabios de una educación autoritaria, censora y condenatoria, tal vez.  Ahora, se agrega la contraria: permisiva, relativa y mutable.  Entre ambas, no encontramos un equilibrio sano y sostenible. 



Te invito a plantearte algunas cuestiones, que te pueden ayudar.  Cuando te aceptas, no te resignas.  Significa que te apruebas en este momento, sabiendo que ya eres y tienes lo que necesitas para estar bien.  A medida que continúas en tu camino, irás desplegando más potencial y creatividad, incorporando conciencia y empatía hacia ti y tu entorno.  Entenderás que la felicidad no es la suma de personas o cosas a tu vida: es la paz contigo mismo.  Una vez que te aceptas y te celebras, la paz y la alegría de ser tú mismo atraerá un mundo de armonía y abundancia disponible ya mismo, según tu nivel energético.

Cuando te rechazas, niegas tu mayor creación: tú mismo.  No eres un rejunte aleatorio de genes ni una casualidad ni un accidente ni uno más.  Estás aquí porque lo decidiste.  Y también decidiste tu cuerpo, tu personalidad, tus padres, tu lugar, tus metas.  “¡Y justo a mí me tocó ser yo!”, podrías decir.  Sí, es tu elección y es magnífica.  Diseñaste tus cualidades y tus desafíos, calibrados para evolucionar junto con el Universo.  ¡Qué maravilloso! 

¿Por qué lo desprecias?  Quizás porque lo desconoces o porque crees que no lo mereces.  Libera esas concepciones que te han impuesto para manipularte.  Eres un ser humano divino, en tiempos excepcionales, con oportunidades increíbles.  Desecha los cantos de sirena del sistema y mírate al espejo: respira, este aire te conecta con todos tus hermanos y con la energía sagrada que te dio Vida. Siente tu corazón llenarse de la paz de ser tú mismo, del amor de aceptarte íntegramente, de la unión de ser parte de Dios/Diosa.