sábado, 30 de abril de 2011

Errores maravillosos

    

Tomo fotos con mi celular.  A veces, lo muevo o lo cierro antes de que la fotografía se fije y aparecen estos "errores".  Me parecen más hermosos que la misma realidad que pretendía captar.  ¿Una  metáfora??? 

miércoles, 27 de abril de 2011

Jugando en el Museo


Hace poco, pasé a dar una vuelta por el Museo de Bellas Artes.  Visité mis cuadros favoritos y me puse a "jugar" con otros.  Aunque no se aprecia en la foto, esta obra de Ary Brizzi tiene distintos tonos de negros y grises.  Moviéndome a su alrededor (de muy cerca a lejos, de arriba, de abajo, de cualquier costado), cada posición cambia la perspectiva y da una infinidad de luces y sombras, de nuevas posibilidades muy enriquecedoras y bellas.


Esta instalación de Julio Le Parc va transformándose a medida que las luces van rotando y creando distintos "cuadros", llenos de colores y profundidades.  Me senté en el suelo y me dejé llevar.

Me gusta ir a los museos y galerías y vivir sus obras.  Me encanta tocarlas (ya he recibido muchos retos y advertencias), moverme a su alrededor, perderme en ellas, descubrir otros aspectos y significados.  Salgo renovada, contenta, abierta, plena.

lunes, 25 de abril de 2011

Todo es divino

Comparto este precioso texto (desconozco el autor) porque, al igual que él, creo que TODO es divino. En nuestra dualidad, clasificamos en bueno/malo, luz/oscuridad, profano/sagrado.  En la unidad, comprendemos e integramos. Cuando alguien dice “soy espiritual”, ¿qué está diciendo?  ¿Que los demás no?  ¿Que sólo él merece el cielo o que es mejor o que tiene algo que le falta a los otros?  Todos somos espirituales porque tenemos espíritu, porque somos chispas de Dios.  Ser espiritual es ser conciente de ello y expresarlo en la vida cotidiana, sencilla y amorosamente, en cada instante.


El mundo es, para cada quien, como lo percibe. Para el caracol no existe el sonido. Para los peces que moran en las profundidades de los océanos, no existe la luz solar. Para nosotros, la percepción está condicionada por los cinco sentidos y la mente. Siempre me pregunto, ¿qué más tendrá el Universo que no captamos con este equipo que la naturaleza nos dio? ¿Tendremos otros sentidos sin desarrollar aún?

Cuando penetramos los mundos internos, subjetivos, a través de la meditación, el mundo se nos crece, se expande. De repente aparecen nuevas realidades que no pueden ser captadas cuando nos enfocamos en el mundo externo. Da la sensación que el mundo se expande, pero lo que en realidad se expande es la conciencia.


Expandir la conciencia es como ponerse unos lentes nuevos y descubrir lo que siempre estuvo presente, pero que no existía para nosotros porque quedaba sin captarse. Expandir la conciencia es ver por primera vez un mundo que está impregnado de divinidad, es descubrir el esplendor de la existencia y la luz oculta en cada átomo de materia. Expandir la conciencia es llenar de divinidad esas partes de uno mismo que quedaron como desconectadas de su fuente y se perciben opacas porque no vemos su luz interna.


Todo es divino, todo es Dios y Dios es el Todo. La imperfección es una percepción imperfecta. El texto sin el contexto es un espejismo.


La mente humana tiene el poder de calificar la vida, y lo bueno y lo malo son calificaciones humanas que han llegado a un grado tal de independencia que parecen caminar por su cuenta, lejos de su Creador. Lo importante de todo esto es comprender el poder tan grande que tenemos cuando percibimos la vida, porque se exterioriza lo percibido.


Expandir la conciencia es expandir la percepción de manera que ésta incluya el Reino de los Cielos. Cada uno de nosotros tiene un pedacito de ese reino como parte de su naturaleza esencial. Está en el Alma de cada quien. De la misma manera que los rayos del sol, al amanecer, esperan a que se abran las ventanas para entrar a nuestra casa a iluminarla, el alma, que es nuestro sol interno, espera igual.


Cada vez que logras ver la divinidad en lo que te rodea, estás acercando su reino a la Tierra. Cada vez que puedes ver, detrás de los defectos, las virtudes del alma humana, estás colaborando en su exteriorización. Cuando los defectos de algún familiar o amigo te perturben, enfócate en sus virtudes, ellas saldrán a darte el encuentro. La vida se hace más armoniosa si percibimos lo divino que está en todas partes.


Que el mundo no te convenza de su aparente imperfección. Todo es Divino. Cada suceso que nos ocurre de alguna manera nos trae una enseñanza que es la lección que necesitamos en ese momento de nuestra evolución. Aceptar lo que tenemos, lo que nos puede estar sucediendo y con ello hacer lo mejor posible, es el reto que la vida nos presenta a cada momento.



Cuando te sientas descorazonado, triste, con temor, hay una oración que puede ayudarte. Es una oración del Maestro Omraam Mikhael Aivanhov que tiene la virtud de darnos fuerza. A mí me sucede así. “Señor, amo tu sabiduría, tengo fe en tu amor y confío en tu Poder.”


Vivir alabando al Creador en Su creación es una invocación a Su Presencia. Recuerdo cuando mi papá al mostrarme una rosa me señalaba que nadie sino Dios podía fabricar la sutileza de sus pétalos, que con toda la tecnología y la ciencia no podíamos hacer tal prodigio. Son las cosas que se quedan grabadas en el alma, semillitas que siembran nuestros padres y con el tiempo germinan. Nuestro Padre Celestial ha puesto en nosotros semillas que al germinar harán de cada uno una divinidad. Preparar las condiciones para que germinen es nuestra tarea y la Confianza en Su Amor, Su Sabiduría y Su Poder preparan el terreno.


¿Qué hace que abra una flor, que crezca un árbol, que germine una semilla, que un bebé se desarrolle en el vientre de su madre? Es el Poder de Dios. Y ese mismo Poder es el que hace germinar las semillas que están dentro de ti.


Cuando te asalten las dudas, cuando creas que todo está perdido, observa el Poder de Dios en la naturaleza recordando que ese mismo Poder está dentro de ti.


Todo es Divino. Tú también.

miércoles, 20 de abril de 2011

Conciente-mente inconciente

Leí una reseña acerca del libro "El animal social" de James Brooks, un periodista que construye una rara novela, mezcla de ciencia, crónica y autoayuda. Siendo alguien afuera de lo alternativo, fascinado por la psiquiatría, la psicología y la neurociencia, es interesante sus conclusiones acerca de los papers publicados por estas especialidades.  El viejo inconciente de Freud ha sido redefinido, dando lugar a un nuevo concepto (un nuevo inconciente).  Lo de Freud es conocido: mientras más moralista sea una persona, más inconciente tendrá. La neurociencia, sin embargo, ha dicho lo contrario: es el inconciente el que genera la moral.  Vale aclarar que el inconciente de Freud es diferente al que ha estado investigando la neurociencia; según ellos, los seres humanos tomamos nuestras decisiones desde la incertidumbre porque el verdadero responsable de nuestros actos concientes es un área del cerebro que no está al alcance de nuestra conciencia.

Brooks lo explica así: "el inconciente ha sido asociado a lo impulsivo, a lo impredecible.  Pero ese concepto ha sido revisado y ahora sabemos que el inconciente puede ser realmente brillante y hacer conexiones creativas.  Es más, el inconciente es gregario. Te quiero ver hacia afuera y estar bien conectado, en comunión con el trabajo, la familia, los amigos, el país y las causas sociales".  La mente conciente, dice, se centra en el poder del individuo.  La mente interior, el nuevo inconciente, busca las conexiones.  ¿Qué es lo que, en verdad, explicaría la gran crisis que hay hoy en el mundo?  Pues que ambos mundos siguen distanciados.


Leer esto me hizo acordar cuando leía sobre psicología y no me veía reflejada en sus deducciones.  Parecía que la oscuridad y lo primitivo eran patrimonios del inconciente, una especie de furiosa y caótica bolsa de gatos, que podía salir con cualquier cosa y destruir nuestra ordenada vida conciente.  Si bien esto podía ser en parte verdad, era nada más que la superficie. Yo pensaba que el inconciente era el lugar de la luz, de lo mejor de nosotros, de la creatividad, de las uniones profundas. 

Cuando nos adentramos en él, ciertamente surgen los esqueletos en el ropero, lo guardado y reprimido porque no pudo ser metabolizado en su momento, pero están allí para ser revisados, comprendidos, sanados y liberados.  Al hacer eso, abrimos la entrada al potencial que traemos, a una plenitud ni siquiera imaginada por el conciente.  Hemos sido inculcados a no creer en ello, a entregar nuestro poder a instituciones y sistemas, a adaptarnos a las limitaciones que otros nos imponen.  Es tiempo de entrar a nosotros mismos y encontrar lo que siempre estuvo allí: la conexión a Todo lo que Es.

lunes, 18 de abril de 2011

¿Pisoteas los brotes del alma?

Hace poco, tuve una sesión por Internet con una mujer con quien trabajamos una de sus Niñas Internas. Se conmovió profundamente y comprendió uno de los mecanismos que la dañaban y cómo resolverlo. Enseguida, comenzó a recordar todos los problemas actuales y pasados que tenía y a arrojarlos sobre su frágil Niña recién descubierta. Es, lamentablemente, una reacción común que inhibe la sanación y el crecimiento.

Sea la forma que tome (niños interiores, aspectos, actitudes, metas, etc.), entendemos algo y ya deseamos que se solucione o que se concrete. Hay una faceta positiva y una negativa en la inmediatez en la que vivimos. En la primera, estamos dándonos cuenta de que no necesitamos años para los procesos, tal como sucedía antes. Esta ventaja no está siendo conocida o atendida por muchos, que siguen pensando que cualquier propósito les llevará un lapso inconmensurable, incluidos los de sanación y despertar. Los tiempos están sorprendente y maravillosamente acelerados. Esto no supone una aceleración superficial. Para que algo tenga una consolidación real, se necesita paciencia, constancia, voluntad, confianza, profundización.
 
Si plantamos una semilla, no se nos ocurriría abrir la tierra todos los días para ver si prendió. Tendremos la fe necesaria para creer que está desarrollándose en tiempo y forma. Cuando veamos el primer brote surgiendo apenas de la tierra, no pensaríamos que es insuficiente y lo pisaríamos impiadosamente para depositar otra semilla, creyendo que será mejor o más rápida. Confiaríamos en el sembrado, abonando con serenidad y perseverancia hasta que se complete el ciclo de crecimiento. ¿Por qué no hacemos esto con nuestras semillas internas?

Al igual que en los logros externos, deseamos alivio y satisfacción inmediatos. Sin embargo, ellos son fugaces e insustanciales. Son necesidades del Ego, que, en el mismo momento en que consigue algo, ya está buscando un nuevo objetivo. Es el mundo del deseo, siempre descontento. Es la mirada en el exterior, siempre más lejos, en la ilusión de que hay algo allí donde no se ve, no se está, no se es. Es el motor de búsqueda encendido continuamente, un Google decepcionado que vierte cientos de páginas en segundos, sin pausa y sin sentido.

El conocido “aquí y ahora” es nada más que un consejo reiterado pero poco practicado. El “no sé lo que quiero, pero lo quiero ya!” de Luca Prodan parece tener más seguidores. La emocionalidad excedida reemplaza la firmeza del camino elegido con corazón. Vivir en el pasado o en el futuro, con exaltados propósitos cambiantes, no nos permite darnos cuenta de que lo único que tenemos que entregar para una nueva vida es el sufrimiento.

Cuando invertimos la mirada y dejamos el mundo fenomenológico, el interior se presenta caótico e intimidante (tanto como el de afuera en realidad, pero con mucho menos conocimiento). Tan acostumbrados estamos a la deslumbrante luz externa, que esa oscuridad se nos ocurre llena de monstruos y amenazas. Cuando nos habituamos a la penumbra, comenzamos a vislumbrar niños y sueños ávidos de ser encontrados y vividos. Más profundamente, una tibia luz nos invita con una dulce insistencia. Al avanzar, el resplandor nos envuelve amorosamente y finalmente sentimos llegar al Hogar que tanto anhelamos. Somos lo que tanto buscamos. El Amado encuentra al Amante.
 

Es tan fácil perderse en los deseos y en las prisas. Es tan subyugante la ilusión del mundo sin el filtro de la conciencia. Es tan agobiante la presión de los miedos y las limitaciones. Tan fuerte como son todos ellos, no hay nada más potente que tú. Nada. Porque ellos son tus creaciones. Porque la Luz en ti es la chispa de Dios/Diosa en ti. ¿Dejarás crecer los brotes de tu alma, arraigarse a la Madre Tierra, nutrirse del Sol? Estás sustentado por una Nueva Energía llena de gracia y sencillez, de creatividad y alegría. Crece en su Amor.

jueves, 14 de abril de 2011

Bueno y malo

Hace un tiempo, estaba viendo televisión con la hija de 15 años de una amiga cuando comenzaron a comentar acerca de una circunstancia bastante terrible. Ella giró hacia mí y, sonriendo, dijo: “ahora no me vas a decir que hay algo positivo en esto, ni vos podés encontrarle algo bueno”. Primero, me sorprendió que ella se hubiera dado cuenta de que yo tenía esa actitud. Luego, lo tomé como un desafío… y le encontré algo positivo.
En realidad, tengo la mente entrenada en encontrar todos los aspectos que pueda de una situación, de un individuo, de la vida. Si los demás ven sólo cosas negativas, busco las positivas y, si solo ven lo bueno, busco lo malo. Habitando (por ahora) una dualidad, se puede hallar de todo en cada cosa. Hay personas que creen que yo no las apruebo o las quiero menos porque advierto particularidades “negativas” de ellas. No hay crítica en ello sino una simple observación de lo que es. El Ego tiene miedo de no ser querido si se notan sus facetas feas. Perdemos mucho tiempo, energía y posibilidades ocultándolas, en lugar de aceptarlas como partes constituyentes de todo ser humano y como oportunidades de crecimiento.



Lo que verdaderamente me importa ahora es encontrar la unidad, trascender las polaridades e integrar los distintos aspectos desde una visión superior y totalizadora.

lunes, 11 de abril de 2011

La muerte es una experiencia gozosa

Este escrito de Neale Donald Walsch (de “Conversaciones con Dios”) es sumamente importante en estos tiempos en que muchas almas están desencarnando, en millares a veces (como en Japón). Walsch lo expresa brillantemente al decir que “el Alma de nuestro ser querido que partió se ha hecho una con nosotros, en cuerpo y alma”. Una aclaración al respecto: esto sucede cuando podemos aceptar y liberar al Alma. Si continuamos sufriendo (en negación, en cólera, en rechazo) o si dejamos de vivir nuestra vida o si nos aferramos a ellos continuamente o los invocamos para que nos “salven”, ese dolor y apego impide esta unión amorosa que Donald expresa. Mi hermano y mi madre partieron con poca diferencia. Jamás sentí que se “fueron”; ni los lloré ni los extraño: están en mí siempre. La Nueva Historia Cultural: La Muerte es una Experiencia Gozosa La Nueva Historia Cultural que se nos ofrece en Conversaciones con Dios nos dice que la muerte no existe. No, por lo menos, como nosotros la definimos. No es el final de la vida, porque la vida nunca se termina, dice la Nueva Historia, sino que sigue por siempre y para siempre, y aún más para siempre. Por lo tanto, la fecha en que una persona “muere”, en la Nueva Historia se la conoce como el Día de la Continuación de esa persona. Es más, la Nueva Historia nos dice que el evento que los humanos llamamos muerte es una experiencia extática, marcada por un gran despertar a lo que es Realmente, una alegre reunión con cada ser querido que hayamos conocido (en esta vida o cualquier otra), y una feliz fusión con lo Divino. Por último, las afirmaciones de la Nueva Historia que bien podrían producir el mayor choque cultural son sus anuncios de que la muerte nunca es y nunca puede ser impuesta a nadie, sino que siempre es elegida – y, lo que es aún más sorprendente, la muerte no es definitiva. Todo esto es cierto, dice la Nueva Historia, debido a Quienes Somos. Cada alma es una individuación de la Divinidad, dice la Historia, y como tales, nada le puede pasar AL Alma, sino que todo pasa A TRAVÉS del Alma. Esto incluye la muerte. Por lo tanto ningún Alma muere nunca de ninguna manera, ni en ningún momento, que no sea de su propia elección. Tampoco le sucede nada a Lo Divino que sea en contra de la Voluntad de lo Divino. Ya que lo Divino es Todopoderoso y Omnipresente en Todas Partes y en Todo, un evento que ocurra en contra de su voluntad es, por definición, funcionalmente imposible. La muerte es una experiencia sagrada, llena de verdad y de gracia, cuando Lo Que Es se conoce totalmente y no es simplemente imaginado; cuando todo dolor y sufrimiento de cualquier tipo, físico o emocional, se disuelve; cuando el miedo y la incertidumbre y la infelicidad se evaporan; y cuando la suave y gentil conciencia de la presencia eterna de Dios y la dulzura del amor incondicional de Dios se vierte en la Esencia de Nuestro Ser, revelando allí que es, y que siempre ha sido, nuestra Esencia misma. Reconciliando las Historias: Por qué la Gente Elige Morir Si se va a creer la Nueva Historia Cultural, muchas preguntas deberán ser contestadas. Muchas de ellas tendrán que ver con la Intención del Alma, si es que en efecto está eligiendo marcharse de esta vida física por su propia voluntad. Muchas personas en duelo me dicen: “¿Quieres decir que mi esposa (esposo, madre, padre, hijo, etc.) en realidad eligió dejarme? ¿Qué me estás diciendo? ¿Qué me dice eso acerca de lo felices que eran conmigo?” Si no tenemos cuidado, sin darnos cuenta vamos a convertir la Nueva Historia en una ocasión para la cólera. De hecho, todos hemos conocido personas que, incluso estando inmersas en la Vieja Historia Cultural, se han enojado con un ser querido por morir. Las dos Historias se reconcilian cuando comprendemos plenamente y abrazamos la verdad que nos cuentan las dos historias: que quien muere nunca nos deja realmente, sino que siempre está con nosotros. Con nuestro simple pensamiento sobre ellos, su Esencia vuela a nosotros a la velocidad de la luz, revoloteando a nuestro alrededor, y de hecho, impregnando nuestro cuerpo. Podemos sentirlos con nosotros y dentro de nosotros. Y aunque mucha gente diga que eso no es tan reconfortante como su mano cálida en la nuestra y su cuerpo para abrazar, encontramos un consuelo diferente, mucho mayor que el físico, en la fusión de la Esencia que duplica lo que ocurre entre nosotros y Dios en el momento de nuestra propia muerte. Puede haber una dicha en esta fusión que iguale la maravilla y la alegría del contacto físico; porque cuando se tocan las Almas, los cuerpos igualmente experimentan el éxtasis. Yo he conocido esto en mi vida cuando he sido tocado por Dios, y en algún momento incluso por pensar en alguien más. Otros lo han conocido también, y han escrito de eso en poemas y canciones. Aun así, si el Alma de nuestro ser querido tan amado estaba tan feliz con nosotros, ¿por qué, realmente, se marchó? Esa sigue siendo la pregunta apremiante. La respuesta es que no se marchó, sino que elige ahora quedarse con nosotros en una nueva forma, una forma mediante la cual nos puede mostrar más amor, y experimentar más unicidad y felicidad con nosotros, que cualquier otra expresión de vida en lo físico podría haber permitido. Cuando un Alma parte del cuerpo, lo hace porque ha completado su viaje en esta expresión particular de vida. Ha experimentado lo que vino a experimentar, y ahora está lista para lo que podríamos llamar, en términos terrenales, su recompensa final, su premio mayor, y su mayor experiencia: la oportunidad de amar a sus Amados tan plenamente que, literalmente, se convierte en nosotros en una unión eterna de la Esencia de vida. El Alma de nuestro ser querido que partió se ha hecho una con nosotros, en cuerpo y alma. Y no hay cielo mayor que ése. Imaginen poder impregnar el cuerpo de su Amado, hacerse Uno a un nivel sub-molecular, incluso mientras las Almas que están en el cielo hacen lo que quieren. Y así será, cuando su ser querido muera, en la Tierra como en el Cielo.

miércoles, 6 de abril de 2011

Deseo

"Habrá alguien que viene de un trasfondo de pobreza que es influenciado a un deseo fuerte. Y los cohetes de deseo se lanzarán y entonces esa persona encontrará una manera de encontrar armonía vibracional con su deseo. Esa persona entrará en este flujo en donde las cosas materiales fluyen a su vida como abundancia exagerada. Y sentirá breves momentos de éxito cuando venga, hasta que eventualmente será enterrado en la incomodidad de ello y entonces el próximo cohete de deseo que nace es: "Deseo una vida más simple." (Abraham Hicks)

Esto es el Ego en su máxima expresión: deseo siempre insatisfecho. Es su fase negativa. En positivo y desde el Ser, puede ser usado como un motor para la creación conciente, sin apegarse a los resultados.

martes, 5 de abril de 2011

¡GRACIAS!!

Todavía, faltan algunos festejos de cumpleaños, pero se inició lleno de trabajo y repleto de amor, en serenidad, fluidez y alegría. Justo como lo quería… Agradezco a todos los que me escribieron y, especialmente, a aquellos que dijeron palabras tan bonitas acerca de mí y de mi trabajo. Es maravilloso tener almas tan generosas tan cerca tan lejos tan en el corazón.

lunes, 4 de abril de 2011

¿Conoces la nueva plantilla del Amor?


En el Taller de Meditación Integral del domingo (hermoso grupo y precioso trabajo), elaboramos mucho los aspectos femeninos y masculinos, ya que ellos son sumamente importantes para la creación y para el sostenimiento del amor, tal como se está manifestando ahora.


Tendemos a considerar al amor como un tierno sentimiento, que se conduele de todo, más bien frágil y volátil; como cuando decimos de alguien que es “bueno” y terminamos significando que es tonto y manipulable. Nada más alejado de la verdad. El amor no es un sentimiento, es una energía sagrada, es conciencia permanente, aceptación, sabiduría, poder, es la perfecta integración de la mente y el corazón, unidos al cuerpo en este plano.


Hace bastante tiempo, además de otros cambios notables, percibí una transformación fundamental en mis emociones. Iban perdiendo poder en mí, al punto de que hoy constituyen esporádicas ráfagas pasajeras. Eso son en realidad, mensajes de estados internos; el problema es que las unimos a los pensamientos y hacemos un dominó interminable y doloroso que no nos lleva a nada bueno.


Igualmente, noté que no me enredaba del sufrimiento, ni del propio ni del ajeno. Sin pensarlo, subía un nivel y lo observaba como parte de una resistencia o de la falta de aceptación de una situación o de una neurótica forma de tomar la vida o de paradigmas que arrastramos como humanidad, etc. Este desapego me volvía más clara, certera y rápida en encontrar la resolución del asunto.


Comencé a pensar que me estaba tornando insensible, cosa que no era del todo mala teniendo en cuenta los estragos que mi hipersensibilidad me había causado en el pasado… Pero no era eso, porque, cuando presenciaba un acto de amor incondicional o un momento de gran belleza, se me saltaban las lágrimas espontáneamente. ¿Qué estaba pasando?


La anterior semana, recibí una canalización de Lauren Gorgo que me confirmó mis percepciones: “Este proceso de expansión está creando la nueva plantilla de amor que ahora se está anclando en el planeta. Este nuevo amor es una combinación de amor empoderado (corazón superior) y sabiduría espiritual (plexo solar), a lo que los invisibles se refieren como la activación del “cerebro del cuerpo”. El resultado total de esta expansión/apertura/activación está dando lugar a nuestras avanzadas capacidades humano-divinas para amar más allá del apego (mental y emocional). Este nivel más elevado de amor trasciende la emoción y es lo que se requiere para navegar sin esfuerzo y con éxito a través de los años restantes de la ascensión global. Es importante darse cuenta de que este amor no es lo mismo que la compasión. Aunque incluye la compasión, éste se encuentra a un nivel mucho más elevado… más como la empatía versus lástima, donde podemos entender los sentimientos de otros sin quedar enredados, abrumados ni perdidos en esos sentimientos. Y es aún más amplio y más inclusivo que eso… es el tipo de amor que mantiene a toda la humanidad en un lugar seguro, sabiendo profundamente y exudando desde dentro que “todo está en orden divino perfecto”, independientemente de las circunstancias externas que van a seguir desafiándonos y confundiéndonos.


Este amor es el mismo tipo de amor incondicional que hemos recibido de nuestros equipos álmicos y guías espirituales a través de nuestro propio proceso de ascensión durante los últimos 12 años, mientras sufrimos el desmantelamiento, reestructuración y reconstrucción de nuestras vidas personales. Aunque nuestros guías se preocupan profundamente por nuestro bienestar, nunca se mortifican ni se identifican con nuestro sufrimiento u oscuridad, sabiendo que eso sólo serviría para realzar nuestro dolor. Ellos más bien, delicada y continuamente, levantan nuestras miradas a una visión más expandida… a los más grandes actos de amor que a menudo precipitan nuestro sufrimiento… esos mismos actos que nos obligan a aceptar y cultivar más de nuestro potencial.


Este es el amor que a los trabajadores de la luz, semillas estelares, índigos, etc. se nos pide abrazar y encarnar ahora… sin vacilar. Se nos está pidiendo aplicar los principios femeninos divinos del amor de una manera divinamente masculina… sostener los pilares de luz en su lugar manteniéndonos fuertes y disciplinados en nuestro enfoque (energía arquetipo del padre divino), y al mismo tiempo nutrir a la humanidad con el sentimiento de que “todo está bien” (energía arquetipo de la madre divina). En esta etapa de nuestro viaje es nuestra constante responsabilidad permanecer neutrales, sabiendo que nuestros pensamientos vacilantes pueden crear ondas profundas de distorsión eléctrica que pueden magnificar enormemente los pensamientos de impotencia y discordancia en la mente colectiva.


El tipo de amor de mayor vibración que estamos llamados a ofrecer es empoderado y responsable, y por lo tanto no se identifica con ni alimenta la mente colectiva con pensamientos desempoderantes de la misma vibración… pensamientos tales como la lástima y la conmiseración. Todo lo contrario, el amor-divino emana neutralidad… el elíxir dorado de la creación… que acuna a quienes lo necesitan y llena la mente colectiva con pensamientos de amor empoderado, paz, posibilidad y potencial”.


“Estar en el mundo sin ser del mundo” es una expresión que usa Lauren en el escrito y es algo que repito constantemente. Es tiempo de desarrollar el potencial que traemos como almas encarnadas. Es crucial desapegarnos del sufrimiento y de la lástima y sanar nuestros aspectos femeninos y masculinos para que puedan ser pilares de creación. Desarrollarlo en mí y ayudar a hacerlo en otros es el mejor regalo de mi cumpleaños 56 (un 11 entre otros 11 de este año) que puede haber tenido. ¿Despertamos al Amor juntos?

viernes, 1 de abril de 2011

Mimándome

Me estoy consintiendo estos días... bastante... y me encanta! Me he propuesto, desde fines del año pasado, cuidar mi cuerpo, mimarlo, ponerlo diez puntos. Desde depilación definitiva hasta peelings, desde arreglos dentales hasta masajes, pasando por lindos cafés y restaurantes, paseos y descanso. Algunas de estas cosas vienen a través de los sitios de descuentos, tan de moda ahora, y todavía lo disfruto más. ¡Algo que me gusta y más barato! El sueño de cualquier mujer.






Me faltaría algo de ejercicio (me resisto) y un poco más de comida sana, al igual que una actividad creativa (como pintar o bailar). Ya llegará. Me siento mejor que nunca. Cuando tenía 20 años, era una farmacia ambulante: llena de remedios para mis psicosomatizaciones. Ahora, por cumplir 56, estoy armónica, centrada, contenta. Estoy sana.


Cuando dicen que la edad trae enfermedades y problemas, yo creo que es al revés. Obviamente, hay un cierto desgaste físico, pero lo cierto es que el cuerpo actúa en consonancia con la mente y las emociones y es, en definitiva, el que los expresa; por lo tanto, cuanto mejor estoy, más sana estoy. Por otro lado, es el templo del Espíritu, así que lo debo cuidar y proteger.


Estar en la Naturaleza es una de las cosas que más aprecio y mejor me hacen. No soy fotogénica, pero me gustaron estas fotos sacadas en la Reserva de Otamendi: la serenidad del lugar es un marco maravilloso.